La infraestructura logística de Panamá está compuesta por puertos, aeropuertos, zonas económicas especiales, un ferrocarril y una red vial adaptada para facilitar la movilización de carga entre estos nodos, trayendo consigo un alto nivel de conectividad regional y global. Gran parte de esta infraestructura se concentra en las áreas metropolitanas del país, compuesto por las provincias de Panamá y Colón.

Siendo que la mayoría de los nodos logísticos se concentran en el área metropolitana, se observa en la ciudad capital altos niveles de congestión en las vías primarias, secundarias, e inclusive en corredores, la cual es compartida tanto por el transporte de carga como el urbano.

El área metropolitana se conecta el oeste de la ciudad y al interior del país a través del Puente de las Américas y Puente Centenario, ambos puentes conectan a la Carretera Panamericana, la cual se extiende a lo largo del interior hasta comunicar con la frontera de Costa Rica. Actualmente, no existen vías de comunicación ni pasos fronterizos entre Panamá y Colombia.

La ciudad capital cuenta con un sistema de metro, el cual inició operaciones en el 2014, con el objetivo de minimizar los tiempos de tránsito urbano. El metro cuenta con dos líneas en sentido norte-sur y este-oeste, desarrolladas en las áreas con mayor concentración de población. Se estima un tiempo de recorrido total de aproximadamente 25 minutos. El metro es complementado por una red de buses, transporte colectivo no-formal, y transporte selectivo.